Por: Francisco Flores Legarda
“El verdadero espíritu de la navidad habita en tu corazón….
Buenas noches… Dulces sueños.”
Jodorowsky
Una acera arreglada por aquí, un camino, una pista de papel… son días de fotos, de promesas e inauguraciones. A todos los partidos les toca cierta hiperactividad para trasladar sus propuestas o mostrar el trabajo realizado durante años para que las personas puedan tener mayor criterio a la hora de elegir opción política. Pero hay un aspecto de todo este ritual electoral que me maravilla y en el que me gustaría detenerme un momento en esta tribuna: El empeño que tienen aquellos que, aunque gobernando durante años, tienen por mostrarnos todos sus “no logros”, todas las cosas que se han quedado sin hacer, pero que prometen hacer si vuelven a ganar. Es como el fantasma de las navidades pasadas, pero en versión electoral.
En el cuento de Dickens al amargado señor Scrooge se le aparecen tres fantasmas que le hacen cambiar su forma de pensar. Consiguen que se arrepienta de lo hecho para pasar a ser una persona feliz. En versión electoral, el votante hace de señor Scrooge y se pretende que con la aparición de diferentes fantasmas electorales, deje su crítica a la parálisis de Huesca, se arrepienta y vuelva a depositar su voto y confianza en los que han hecho de que no pase nada (bueno sí, un desfile militar) su proyecto de ciudad.
Hablemos del primero de esos espíritus, el de las obras públicas, este espíritu ha estado presente en dos citas electorales para que olvidemos que en todos estos años, se han obras incompletas, desapareción de poderes, odios entre los políticos, que involucran a los ciudadanos, dandonos hasta para llevar en las redas sociales, y en los recintos gubernamenales. Dejo abierto la delicuencia organizada y sus actos de violencia contra el pueblo, que se defiende solo.
Pablo Gaytán, sociólogo urbano, que escribió el libro “Apartheid social en la ciudad de la esperanza cero”, que analiza el gobierno de AMLO, dice que su política social no hace sentido.
“Me pareció que su gobierno fue contradictorio en la política social, por un lado apoya a las personas de la tercera edad y por otro implementa una política de seguridad de cero tolerancia”, cuenta a BBC Mundo.
AMLO importó las política de cero tolerancia del ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani. Esa política se basa en la teoría de las ventanas rotas, que implica que cuando los espacios urbanos no están “aseados” aumentan el vandalismo y la criminalidad.
El segundo de los circulos, con estos mimbres no han faltado nuevas fotos y nuevas promesas de próximas obras públicas cercanas al “pueblo”, pero en lo que a promesa electoral se refiere, el significado de “proximidad” se convierte en muy relativo y a las pruebas me remito, grandes cantidades de partidos de oposición insertados en su gobierno, “actores corruptos del paso”, como lo afirma.
Entre las promesas incumplidas , entre los fantasmas de las elecciones pasadas, hay un ejemplo que me entusiasma especialmente:
El dialogo mañanero “muestra al público cómo era la vida en la Huesca romana”. Ni los oscenses ni los que nos visitan pueden acceder a esas ruinas romanas. Solo puedes acceder si eres alcalde, gobernador y demas puestos públicos, a hacerte una foto como si un plató fuera, despues de todas las elecciones para ser presidente. El empeño en mostrarnos lo no logrado sigue vivo una vez más y en esta precampaña no han faltado las nuevas promesas acompañadas de sus respectivas fotos en el mismo plató, por parte de su partido, y la inefiencia.
El tercer fantasma que nombraré, que nos ha visitado estas elecciones, y el más longevo, es el del centro de Salud del Perpetuo Socorro. El compromiso de construcción de la gran farmacia, cuando en el sector salud no hay medicinas, y todo el conflicto generado durante la pandemia. Pasan los años nada más y nada menos y aún hay políticos en ejercicio de gobierno que se sorprenden cuando vecinos y profesionales se siguen reuniendo cada viernes a recordar su necesidad y poner en evidencia décadas de promesas incumplidas.
En teoría, ningún gobierno se puede sustentar solo con anuncios, ya que su crédito político se agotará, pero la política del anuncio vacío, apenas ha pasado factura electoral, hasta ahora. La sensación de la ciudadanía de no encontrar respuestas en la política ha ido creciendo al igual que la desconfianza y eso es un gran problema para la democracia.
Estoy convencido de que esta forma de postureo político, de fantasmas de elecciones pasadas, de las fotos de autoridades con poder para gestionar, pero que han hecho de la parálisis su proyecto de ciudad, está agotándose, y las alternativas capaces de avanzar nos abrimos paso con rigor, honestidad y propuesta.
Agrego un cuarto fantasma en el que la oposición no encuentra compostura, actitudes de frenar la corrupción en sus filas, priistas enquistados en los gobiernos panistas, jovenes sin experiencia colocados en los colegios electorales, siempre bajo el manto de los partidos, para luego surgir como los mesias, con la toleracia de los “experimentados y profesionales políticos de los partidos”, con gran experiencia en la administración publica, dicen.
Los grandes gobernantes de oposición nos deben una actitud profesional no solo en la “grilla”. No basta pararse en curules y gritar. Es suficiente frenar con mano dura los actos de frustación y corrupcion de los poderes del Estado.
Cerca tenemos las fiestas, lejos tenemos un orden gubernamental para todo el pueblo.
Salud y larga vida
Profesor por Oposición de la Facultad de Derecho de la UACH.
@profesor_F
