
fuente: excelsior
La violencia generada por el crimen organizado ha dejado desde 2010 a la fecha una estela de 21 buscadores de desaparecidos muertos y dos de los que se desconoce su paradero, de acuerdo con un conteo realizado por este diario.
Por lo que, con el asesinato de Sofía Raygoza, perpetrado ayer en Zacatecas, suman 16 madres buscadoras asesinadas y una desaparecida, así como cinco buscadores ultimados y uno del que se desconoce dónde está.
El primer caso documentado fue el homicidio de la activista chihuahuense Marisela Escobedo.
El 16 de diciembre de 2010, cerca de las 21:00 horas, Escobedo Ortiz recogía las pancartas con las que denunciaba la impunidad por el feminicidio de su hija, Rubí Marisol, durante el plantón que realizaba frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, cuando un sujeto bajó de un vehículo y, aunque Marisela intentó huir, éste la persiguió y le disparó en varias ocasiones, de acuerdo con lo documentado por la CNDH.
A partir de ese homicidio, la lista de buscadores asesinados siguió creciendo, pues, el 28 de noviembre de 2011, Nepomuceno Moreno Núñez, de 56 años, quien denunciaba la desaparición de su hijo Mario Moreno León, fue asesinado en Sonora.


