La reforma busca posicionar a Chihuahua como un modelo en el manejo responsable del agua, enfrentando con decisión la problemática hídrica que amenaza el bien común de la región.
Esta respuesta subraya el compromiso de la Secretaría General de Gobierno con la mejora continua y la profesionalización del servicio público, a pesar de las críticas infundadas y la desinformación que puedan surgir desde la legislatura.