
AL AMPARO DE LA LUNA…
G. Arturo Limón D.
Cuando el sabio señala a la Luna, el necio mira el dedo.
Confucio
La soberbia luna de octubre nos invita no solo a la contemplación sino a la reflexión, de la luna se han dicho y se dirán tantas cosas que si ya fue conquistada en 1969 y el debate de tal hecho sigue, de la luna se han dicho que es un trozo de queso para los más simples y que es un pedazo de tierra arrancado de cuajo de ella en el ayer.
Pero mes a mes su aparición, y desaparición en el cielo, su menguar y crecer que debemos entender cuando sus picos están hacia el oriente dicen que es luna creciente, en fin la luna es como tú, como todos, con una dualidad que nos otorga la cara luminosa bañada por nuestro sol y la de las sombras ocultas, que apenas los chinos atisban con su tecnología hoy.
La luna misterio y plenitud, eclipse y sombra de la noche, nos regala el espectáculo que lo mismo se asocia a las mareas, que al crecimiento de las plantas. De la mujer, ni qué decir es un misterio, en sus ciclos y carácter, por ello es una vieja aliada para enamorarle y su más bello rostro aparece en ella, la luna de octubre, que en estos días crece.
Por hoy no hablare de las múltiples tragedias que la luna en su tránsito atestigua sobre la tierra al recorrerla del este en Ucrania, al oeste en Gaza, ni tocare siquiera en referencia los años de condena que ha de cubrir quien a pulso como García Luna la ganaron, tampoco hablare de las pequeñeces de las luchas en la búsqueda del poder que se dan lo mismo en el más apartado municipio de México con la muerte de un alcalde en Guerrero o la disputa entre Trump y Kamala por la Casa Blanca en Washington , me abstengo y me doy el tiempo de hacer una pausa para hablar de la luna o diré las lunas, hablar de la lunas, primero de la canción de José Antonio Michel que a manera de vals compuso titulada; Luna de Octubre (1953) de la que en México decimos es la más bella, me refiero a la canción que a la letra dice;
“De las lunas
La de octubre es más hermosa
Porque en ella se refleja la quietud
De dos almas
Que han querido ser dichosas
Al arrullo de su plena juventud
Corazón
Que has sentido el calor de una linda mujer
En las noches de Octubre
Corazón
Que has sabido sufrir y has sabido querer
Desafiando el dolor
Hoy que empieza la vida
Tan solo al pensar
Que tu amor se descubre
El castigo de ayer
Que me diste tan cruel
Parece que murió
Si me voy
No perturbes jamás
La risueña ilusión
De mis sueños dorados
Si me voy
Nunca pienses jamás
Que es con el único fin
De estar lejos de ti
Viviré
Con la eterna pasión que sentí
Desde el día en que te vi
Desde el día en que soñé
Que serías para mí”
El amor, ese pulso constante, que como péndulo eterno nos mueve, ese energético vital que a todos nos conmueve, se advierte en el romanticismo y cada cual lo interpreta a su manera y forma, esta es la mía, la cual expresara a la publicacion del libro; Y Sin Embargo se mueve (1994) bajo el titulo ;
QUIERO DECIR
Que te acuerdes de ver la Luna en este octubre,
que recojas conmigo las hojas del otoño y que cubra de escarcha nuestras sienes el invierno.
Quiero decirte que te queiro,
que quiero que estés conmigo más allá del verano
para que tu otoño y el mío se hagan primaveras,
y después que un solo beso nuestro
derrita la nieve del invierno.
Quiero decirte que quiero que juntos, tú y yo,
construyamos el mañana, confiados en el día por venir,
con deseos siempre de ser, más que
un tú y yo, un nosotros, siempre.
Chihuahua 1988
Ya que menciono el romanticismo, hare aquí una necesaria pausa para rememorar a un clásico como lo es Gustavo Adolfo Bécquer, al que encontré en mis lecturas de los años 60 y quien al leerlo me cautivo por expresiones como esta; “El alma que hablar puede con los ojos, también puede besar con la mirada” Romanticismo, es parte de lo que advierto nuestro mundo actual ha perdido o quizás ya no sabe expresar, la vaciedad de muchas interpretaciones actuales las cuales que se consumen y no se disfrutan a mi parecer tal como lo hicimos nosotros, con música diversa, aún vernácula llenaba nuestras alforjas de sensibilidad y un romanticismo que nos impulsaba a amar, vean esta letra de …
“Yo quiero luz de luna
Para mi noche triste
Para cantar divina la ilusión que me trajiste
Para sentirte mía
Mía tú, como ninguna
Pues desde que te fuiste
No he tenido luz de luna
Yo siento tus amarras como garfios, como garras
Que me ahogan en la playa de la farra y del dolor
Y siento tus cadenas arrastrar en la noche callada
Que sea plenilunada, azul como ninguna
Pues desde que te fuiste
No he tenido luz de luna
Pues desde que te fuiste
No he tenido luz de luna
Si ya no vuelves nunca
Provincianita mía
A mi celda querida que está triste y está fría
Que al menos tu recuerdo
Ponga luz, sobre mi bruma
Pues desde que te fuiste
No he tenido luz de luna
Yo siento tus amarras como garfios, como garras
Que me ahogan en la playa de la farra y del dolor
Y siento tus cadenas arrastrar en la noche callada
Que sea plenilunada, azul como ninguna
Pues desde que te fuiste
No he tenido luz de luna
Pues desde que te fuiste
No he tenido luz de luna”
Corolario
Gracias a todos los que se hayan dado el tiempo de leer este articulo y recuerden: “El amor no tiene cura, pero es la única cura para todos los males” (Leonard Cohen)