Opinión

Capirotada en tiempos de elecciones.

Por: Manuel Narváez Narváez

Email: narvaez.manuel.arturo@gmail.com

Bacheo

Bien por el gobierno del estado que, pese a no ser de su competencia, va a bachear algunos tramos federales, toda vez que el gobierno de México cuyo titular del ejecutivo federal, Andrés Manuel López Obrador, se desentendió de su responsabilidad y abandonó a Chihuahua a su suerte.

De los más de 4500 millones de pesos -y contando- que se requieren para mantener en óptimas condiciones el tránsito en tramos de Chihuahua a Juárez, de Aldama a Ojinaga, de Satevó a Parral y de Nuevo Casas Grandes a Janos, la federación había prometido miserables 450 mdp para taparle el ojo al macho, pero ya ni eso, los canceló.

Ante la indolencia del gobierno asesino de cuarta, la odiada administración estatal, por los comunistas claro está, se cansó de exigir al presidente cumplir con la constitución, y optó mejor por darle una manita de gato a las carreteras, aunque no sean su obligación.

Con esta medida se evitarán más accidentes, muertes, heridos y millonarios daños materiales.

TEE

El pleno del Tribunal Estatal Electoral resolvió ya muy entrada la noche del sábado, que el coordinador de la bancada de Morena en el congreso local, Cuauhtémoc Estrada, cometió violencia política de género en contra de su compañera de militancia y presidente del Poder Legislativo, Adriana Terrazas.

En la demanda interpuesta por la legisladora se incluía también a Oscar Avitia, Rosana Díaz, Leticia Ortega, Oscar Castrejón, Benjamín Carrera, Gustavo de la Rosa Hickerson, María Antonieta Pérez, Magdalena Rentería e Ilse América García Soto, sin embargo, en la lectura del dictamen solo sanciona a Estrado Sotelo, lo que insinúa que se buscó una salida muy cuidada para no alborotar el avispero, es decir, solo a la cabeza visible del morenismo legislativo.

El también abogado juarense tiene chance de revertir la sanción ante la Sala Regional de Guadalajara, si al caso la Sala Superior del TEPJF.

A todas luces la resolución encuera el canibalismo preexistente en Morena, que no exclusivo en el cubil guinda porque también lo hubo por parte de Javier Corral, cuando era gobernador bajo las siglas del PAN, y por Gustavo Madero Muñoz, todavía senador plurinominal por segunda ocasión, en contra de la entonces candidata María Eugenia Campos Galván, cuyos casos quedaron en la absoluta impunidad.

INE

El Instituto Nacional Electoral que encabeza una porrista del presidente, llamó fuertemente la atención a la candidata Xóchitl Gálvez Ruíz por usar el logotipo del organismo electoral como propaganda en sus redes sociales.

La abanderada de la coalición Fuerza y Corazón por México subió a su cuenta de X, antes twitter, una especie de espectacular donde presuntamente el INE aclara que los programas sociales no están sujetos a los partidos políticos.

Resultó evidente la sobrerreacción de Guadalupe Taddei, titular del INE para exigir a Xóchitl que no use logo del “árbitro electoral”, cuando éste debería hacer suya la campaña para dejar en claro que los programas sociales no pertenecen a ningún partido ni gobierno en particular, porque están en la constitución.

Condicionar el voto a cambio de los programas sociales como lo hacía el viejo PRI, hoy resucitado en Morena, sí es un delito, pero el INE y el TEPJF liderados por cuatreras descaradas, no se han atrevido siquiera a molestar al presidente y a la candidata oficialista que, sin parangón en la historia de México, vienen haciendo campaña desde hace dos años, y derrochando miles de millones de pesos de dinero público.

En un país con vigencia del Estado de Derecho el macuspano ya hubiese sido destituido y puesto tras las rejas, Claudia no sería candidata y a Morena ya le habrían cancelado el registro por mañosos, cochinos, puercos y marranos, según la lógica del padre del ´clan´.

Como la elección de Estado se está recrudeciendo, los ciudadanos tenemos el deber moral de defender las elecciones libres, razón de sobra para inundar el país con volantes con la leyenda de que los programas sociales no nacieron en esta administración federal y que, condicionarlos, es un delito que la FGR debería perseguir. Y sí, con los logotipos del INE y de la FGR.

Que le miedo no nos robe la libertad de elegir a nuestros gobernantes.

Es cuanto