Opinión

Cómo detectar a la mentira

Por: G. Arturo Limón D.

En memoria  

Corría el   año de 1973/74 era entonces un  estudiante de la UNAM cursando la carrera de psicología y haciendo mis prácticas en el Instituto Nacional de Protección a la Infancia, INPI en la zona Coyoacán en el entonces D.F.  ubicado justo en el cruce de calzada de Tlalpan y Av. Río Churubusco cuando  una tarde vi aparecer entre nosotros, los estudiantes que practicábamos ahí, a dos hermosas damas madura una de ellas bella como solo lo podía ser Dolores del Río, la consagrada artista mexicana, cuya  belleza era proverbial, se acompañaba de una bellísima joven  mujer, su nombre Aleksandra Aćimović Popović  de origen italiano ya que nació en Bari, creció en Argentina y a sus 23 años llego a nuestro México,   donde generó su trabajo  profesional como vedette y artista del cine en boga  y a la cual conocemos  todos ahora  como Sasha Montengro.

De su actuar y vida otros darán cuenta estos días a su muerte,  ocurrida el pasado 14 de febrero  en Cuernavaca Morelos, yo solo deseó comentar de que se encontraba ahí con la sencillez de ser una persona más, como cualquiera de nosotros,  deseando aprender el manejo e las guarderías, porque junto con la Señora Dolores del Río bellas ambas en cuerpo y espíritu de servicio,   trabajaban en ese momento por implementar la de  la Asociación Nacional de Actores ANDA para auxiliar en el cuidado de los pequeños hijos de las agremiadas de su sindicato.

 Sé que su vida fue por decir lo menor turbulenta en noticas desde los desnudos de sus películas a la boda con el expresidente López Portillo, pero hoy solo deseo hacer constar que era en ese momento una mujer de una belleza excepcional cuando no tenía aun 30 años de edad, y de un corazón noble para emprender ahí la tarea a favor de los niños, es cuanto puedo señalar estos días en que me he enterado de su partida DESCANSE EN PAZ    Aleksandra Aćimović Popović.

MENTIR PARA SOBREVIVR… ¡VAYA MANERA DE EXISTIR!

Vivimos tiempos de campaña y en ella la mentira sobre abunda, han quien dice que lo negro es blanco y quien a lo blanco empaña, pero lo cierto es que en los medios sean redes, impresos digitales u orales, la mentira corre vistiendo como decía apenas hace  aquí  hace una semana con el ropaje de la verdad buscando engañar a todos, no citare memes o montajes para mostrad de la mentira sus ropajes prefiero con usted amable lector dar algunas ideas que le permitan detectar l como detectar mentiras tomado del libro ‘Como detectar mentiras’ de Paul Ekman algunas ideas aquí las que pueden caber en este espacio breve de la colaboración, haga usted ssu juicioas y aplíquelas  con sensatez y razón.

“La detección del engaño a partir de las palabras, la voz y el cuerpo.

‘¿Y cómo puede usted saber que he dicho una mentira?’, ‘Mi querido niño, las mentiras se descubren enseguida, porque son de dos clases: hay mentiras con patas cortas y mentiras con narices largas. La tuya es una de esas mentiras de nariz larga.’ Pinocho, 1892.

La gente mentiría menos si supusiese que existe un signo seguro del mentir, pero no existe. No hay ningún signo del engaño en sí, ningún ademán o gesto, expresión facial o torsión muscular que en y por sí mismo signifique que la persona está mintiendo. Sólo hay indicios de que su preparación para mentir ha sido deficiente, así como indicios de que ciertas emociones no se corresponden con el curso general de lo que dice. Estos son las autodelaciones y las pistas sobre el embuste. El cazador de mentiras debe aprender a ver de qué modo queda registrada una emoción en el habla, el cuerpo y el rostro humanos, qué huellas pueden dejar a pesar de las tentativas del mentiroso por ocultar sus sentimientos, y qué es lo que hace que uno se forme falsas impresiones emocionales. Descubrir el engaño exige asimismo comprender de qué modo estas conductas pueden revelar que el mentiroso va armando su estrategia a medida que avanza…

fortuna, éste no necesita escrutar con igual cuidado todo lo que puede ver y oír. No toda fuente de información en el curso de un diálogo es confiable; algunas autodelatan mucho más que otras.

Las palabras

Curiosamente, a muchos mentirosos los traicionan sus palabras porque se descuidan. No es que no pudieran disimular, o que lo intentaran pero fallaron: ocurre simplemente que se despreocuparon de inventar su historia con cuidado. El director de una empresa de selección de personal directivo relataba el caso de un individuo que se había presentado a su agencia dos veces, con diferente nombre, en el curso de un mismo año. Cuando le preguntaron por cuál de los dos nombres quería ser llamado, ‘…el sujeto, que primero había dicho que se llamaba Leslie D’Ainter y luego cambió ese nombre por el de Lester Dainter, siguió adelante con su mentira sin que se le moviera un pelo.

Explicó que había cambiado su nombre de pila porque Leslie sonaba muy femenino,* y su apellido, para volverlo más fácil de pronunciar.

Pero lo que realmente lo delató fueron las referencias que dio. Presentó tres cartas de recomendación deslumbrantes; sin embargo, en todas ellas el empleador había cometido un error ortográfico en la misma palabra’.

La voz

Entendemos por ‘la voz’ todo lo que incluye el habla aparte de las palabras mismas. Los indicios vocales más comunes de un engaño son las pausas demasiado largas o frecuentes…

Estos errores y pausas que denotan engaño pueden deberse a dos razones vinculadas entre sí. Quizás el mentiroso no ha elaborado su plan de antemano; si no suponía que iba a tener que mentir, o si lo suponía pero una determinada pregunta le pilla por sorpresa, puede incurrir en tales vacilaciones o errores vocales. Sin embargo, éstos pueden producirse incluso cuando hay un plan previo bien elaborado.

 … Una mujer que escuchándose advierte lo mal que suena lo que dice tendrá más temor de que la descubran, lo cual no hará sino intensificar sus errores vocales y exagerar sus pausas…

El cuerpo

La psicología académica enseñaba con cierto orgullo que, según habían demostrado los experimentos científicos, era un mito la suposición de algunos legos de ser capaces de conocer las emociones o la personalidad a través del rostro o del cuerpo de un individuo. Los pocos científicos sociales o terapeutas que continuaban escribiendo sobre el tema del movimiento corporal eran considerados, como los que se interesaban por los fenómenos de percepción extrasensorial y la grafología, ingenuos, crédulos o charlatanes.

.. Hay unos sesenta emblemas en uso actualmente…  Como ejemplo de otros emblemas bien conocidos citemos el vaivén vertical de la cabeza para decir que sí o su vaivén horizontal para decir que no; su inclinación, a veces acompañada por un giro de la mano, para decirle a alguien que se acerque hasta donde uno está o lo acompañe; la agitación de la mano en alto para decir adiós; la mano puesta detrás de la oreja para significar que no se escucha; el pulgar levantado con el que el caminante hace auto-stop en una carretera; el dedo mayor cruzado sobre el índice para rogar que se cumpla un deseo, etc.”

¡APRENDAMOS A DETECTAR LA MENTIRA!