Expasnión Política
Dulce Soto @dulceanahisoto
Este año tuvo claroscuros en materia de salud, combate a la pobreza y educación, pues aunque algunos indicadores mejoraron, aún faltan avances sustanciales en estos sectores.
Durante 2023 hubo dos buenas noticias en materia de desarrollo social: la población en situación de pobreza disminuyó en México y también decrecieron las quejas por desabasto de medicamentos.
Sin embargo, estas mejoras no alcanzan para asegurar que hay avances generales en el bienestar económico, la salud y la educación de toda la población.
Los datos oficiales arrojan que la población en pobreza extrema creció ligeramente y también aumentó el número de personas en situación de vulnerabilidad por carencias sociales.
En cuanto a salud, la población sin acceso a servicios básicos se incrementó mientras el gobierno federal no logra mejorar las compras públicas de medicamentos, lo que provoca tardanza en las adquisiciones y aumenta el riesgo de escasez de insumos médicos.
En materia de educación, el rezago académico se agudizó en el país y el alumnado obtuvo los menores puntajes en la prueba PISA 2022, que mide habilidades en matemáticas, lectura y ciencias.
Aquí presentamos los datos que marcaron el 2023 en temas de desarrollo social.
Pobreza
1. Disminuye población en pobreza
En 2023, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) presentó su medición de la pobreza 2022, en la que concluyó que la población en esta situación disminuyó el año pasado.
De acuerdo con el informe, 41.9% de la población mexicana estaba en situación de pobreza en 2018, es decir, 51.9 millones de personas. En 2022, la proporción disminuyó a 36.3%, lo que equivale a 46.8 millones de personas. Esto significa que, en cuatro años, 5.1 millones de personas salieron de la pobreza.
2. Pero aumenta pobreza extrema
El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró las cifras al considerar que la reducción de la pobreza es un logro de su gobierno.
Ha funcionado nuestra estrategia, que se puede resumir en una frase: por el bien de todos, primero los pobres. Hay menos pobreza y menos desigualdad en nuestro país, esto es un gran logro”,
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México
Sin embargo, la población en pobreza extrema no se redujo. Por el contrario, pasó de 7% de la población en esa situación en 2018 (8.7 millones de personas) a 7.1% en 2022 (9.1 millones de personas).
El Coneval explicó que el aumento no es estadísticamente significativo, no obstante, implica que otras 400,000 mil personas adicionales viven en pobreza extrema.
3. Y también la población vulnerable por carencias sociales
La medición de Coneval arrojó además que, aunque disminuyó la pobreza, el número de personas vulnerables por carencias sociales se incrementó.
En 2018, 25 millones de personas (20.2% de la población) vivían con al menos tres carencias sociales y para 2022 eran 32.1 millones de personas (24.9%).
Para el Coneval estas son las crencias sociales: rezago educativo, acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, acceso a los servicios básicos en la vivienda, y acceso a la alimentación nutritiva y de calidad.
Salud
4. Más gente sin acceso a servicios de salud
Una de las carencias sociales que más aumentó en México entre 2018 y 2022 fue la carencia por acceso a servicios de salud.
Durante este periodo, la población sin servicios médicos básicos creció 2.4 veces, al pasar de 20.1 millones de personas (16.2% de la población total) a 50.4 millones de personas (39.1%).
5. Disminuye el desabasto
Aunque este año se registraron menos quejas por la falta de medicamentos, esta es una problemática que persiste en los hospitales públicos pese a diversos intentos gubernamentales para resolverla.
De acuerdo con Cero Desabasto, un colectivo que recibe reportes de escasez de insumos y genera estadísticas, el año pasado le notificaron 1,461 quejas por falta de medicinas en diversos hospitales del país. En 2023, aunque ligeramente, recibió menos: 1,349, una disminución de 7.6%.
6. Fallas en compras
Uno de los factores que impiden acabar con el desabasto de fármacos en el sector público se asocia con las fallas en las compras de insumos.
El método para adquirir medicamentos se ha modificado en varias ocasiones en el sexenio, sin que algún cambio resulte exitoso, y 2023 no fue la excepción.
Al inicio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se quitó al IMSS la responsabilidad de la compra consolidada de medicamentos, tarea que había hecho durante años en sexenios pasados.
El mandatario federal le entregó esta encomienda a la Secretaría de Hacienda y, después, al ahora extinto Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que a su vez contrató a la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS).
Esta alianza no tuvo éxito: las compras se retrasaron y no se adquirieron todos los insumos solicitados por las instituciones de salud mexicanas.
Debido a ello, el gobierno terminó el convenio y dejó la compra de medicinas solo al Insabi, organismo que desapareció oficialmente este año para ceder sus responsabilidades al IMSS-Bienestar.
La última adquisición de insumos sanitarios la llevó a cabo la Secretaría de Salud y, aunque el titular de la dependencia ha declarado que los medicamentos están asegurados, apenas logró comprar 58% de los fármacos requeridos.
A partir de 2024, las compras consolidadas quedarán en manos de la paraestatal Birmex (Laboratorio de Biológicos y Reactivos de México).
7. Centralizan sistema de salud
Desde su campaña presidencial de 2018, López Obrador prometió entregar un mejor sistema de salud, al nivel del de Dinamarca, que es considerado uno de los mejores del mundo.
Tras las fallas descritas arriba, el presidente puso al IMSS-Bienestar a cargo de otorgar atención y medicamentos gratuitos a la población sin seguridad social.
Este 2023, el Congreso de la Unión aprobó transferir al organismo público los recursos humanos, económicos y la infraestructura sanitaria de cada estado del país.
A la fecha, 23 estados han suscrito convenios para ese fin. De esta manera, el sistema de salud se federaliza de nuevo y el IMSS-Bienestar está a cargo de toda su administración.
Educación
8. Crece rezago educativo
Los impactos en la educación causados por la pandemia de covid-19 se han mantenido. Entre 2018 y 2022 creció el rezago educativo, al pasar de 19% de la población en esa situación durante 2018 a 19.4% en 2022, de acuerdo con datos del Coneval difundidos este año.
Es decir, en cuatro años el número de personas con rezago educativo se incrementó de 23.5 millones a 25.1 millones.
9. Bajos resultados en prueba PISA
Otra medición que dio cuenta de los problemas educativos en México fue la del Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés) 2022.
Se trata de un examen de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que evalúa en 81 países las habilidades de estudiantes de 15 años en matemáticas, lectura y ciencias.
Los resultados se difundieron en 2023 y demostraron que el alumnado de México retrocedió en estas materias, al alcanzar 395 puntos en matemáticas, 415 en lectura y 472 en ciencias, mientras que el promedio de la OCDE fue de 472, 476 y 485, respectivamente.