Guerrero, Veracruz, Chihuahua, Chiapas y Edomex, con 338 millones de pesos para educación “perdidos”: Auditoría.
Animal Político
Entre las irregularidades en educación encontradas por la Auditoría, en todos los estados, están la falta de documentación justificativa y comprobatoria del gasto.
Los gobiernos de los estados ejercieron 457 millones de pesos etiquetados para educación sin comprobar en qué lo gastaron, lo que representa el 6.1% de los ocho mil 609 millones de pesos que recibieron en 2023.
Se trata del mayor monto de irregularidades observado en los últimos seis años en el gasto del Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de Adultos (FAETA).
Las entidades que concentran el 74% de irregularidades, que ascienden a 338 millones de pesos son Guerrero, Veracruz, Chihuahua, México y Chiapas, según detectó la Auditoría Superior de la Federación en la primera entrega de informes de Cuenta Pública 2023.
El estado con más irregularidades fue Guerrero, que recibió 314 millones 530 mil pesos del Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de Adultos (FAETA), pero de ello, gastó 131 millones de pesos (41%) sin presentar comprobación.
Entre las irregularidades encontradas por la Auditoría en todos los estados está la falta de documentación justificativa y comprobatoria del gasto; es decir, aunque las entidades gastaron los recursos, no hay facturas, contratos ni ninguna otra documentación que compruebe en qué se aplicaron.
Esta fue la irregularidad más recurrente, pues ascendió a 288 millones de pesos, que representaron el 63% del monto total por aclarar. Le siguen los pagos indebidos o injustificados al personal por 135.2 millones de pesos (29.5% del monto total por aclarar).
También hubo recursos o rendimientos financieros no ejercidos, devengados o sin ser reintegrados a la Tesorería de la Federación, por 22.2 millones de pesos, (4.8% del monto total por aclarar).
Auditoria detecta alza de irregularidades
El resto de irregularidades consistió en la falta de aplicación de penas convencionales a los trabajadores, y saldos bancarios sin conciliar (3.4 millones de pesos); transferencia de recursos a otras cuentas bancarias por 2.6 millones de pesos; pagos a trabajadores no identificados en los centros de trabajo por 2.3 millones de pesos.
Además, las entidades pagaron 2.1 millones de pesos por bienes y servicios que no se hicieron; además de pagos improcedentes por 1.7 millones de pesos.
La Auditoría detectó un alza en las irregularidades del FAETA, toda vez que en el monto por aclarar con respecto a la muestra auditada fue de 0.2% en 2021; 5.3% en 2022 y de 6.1% en 2023.
“Este incremento se debe principalmente a la falta de documentación comprobatoria del gasto, que se determinó en los estados de Aguascalientes, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Colima, Durango, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Quintana Roo, Sonora y Veracruz”, determinó la auditoría.
Ante las irregularidades, la Auditoría recomendó fortalecer los mecanismos de control y supervisión, para que las operaciones presupuestarias y contables del fondo se registren en los sistemas correspondientes; implementar mecanismos de supervisión que permitan validar que el personal contratado acredite el perfil académico requerido y establecer las medidas necesarias para llevar a cabo una planeación estratégica y supervisión adecuadas para el ejercicio oportuno de los recursos.