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PorAndrés Martínez
En entrevista con Infobae México, el doctor Javier Ulises Oliva Posada aclaró las evidencias de estos grupos en el país sudamericano.
La violencia provocada por los diferentes grupos criminales en Guayaquil, Ecuador, escaló de manera significativa la tarde de este martes 9 de enero, luego de que sujetos armados tomaran un canal de televisión que transmitía en vivo, dejando evidenciado el secuestro de los trabajadores y periodistas del canal de comunicación. Estos hechos se extendieron a otros lugares como cárceles, centros educativos, entre otros, generando caos y pánico entre la población.
Los actos violentos se dan luego de que José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, líder de la banda de Los Choneros, considerados como el grupo criminal más peligroso del país sudamericano, se fugara de la cárcel regional de Guayaquil el pasado domingo 7 de enero, previo a que lo trasladaran al centro de máxima seguridad conocido como La Roca.
Los Choneros tienen vínculos con el Cártel de Sinaloa, mientras que su grupo rival conocido como Los Lobos se les asocia con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), pero ¿Qué tanta responsabilidad tienen los cárteles mexicanos en actos violentos en Ecuador?
En entrevista con Infobae México, Javier Ulises Oliva Posada, doctor en Ciencia Política y maestro en Estudios Latinoamericanos por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró que no existe evidencia de que los cárteles mexicanos estén detrás de la violencia que vive el país sudamericano.
Aseguró que aunque para algunas agencias noticiosas estadounidenses mencionan la presencia del Cártel de Sinaloa y del CJNG en ese país, “preponderantemente, de manera muy clara y predominante, se trata de organizaciones criminales ligadas al narcotráfico colombiano”.
“Esto lo están moviendo las bandas criminales de tráfico de cocaína de Colombia. Si hubiera evidencias contundentes de la presencia de criminalidad mexicana en Ecuador desde luego que sería motivo de entrevistas a nivel más alto de las autoridades de Estados Unidos, México y Ecuador. Que yo sepa no las hay, entonces también es una forma de distracción”, explicó a esta casa editorial.
Aseguró que los dichos de Los Choneros o de Los Lobos sobre que tiene vínculos con grupos mexicanos “se tiene que probar, o sea mentir no es suficiente y no le vamos a dar crédito a las palabras de personas que son auténticamente capaces de matar a su madre”.
El especialista de la UNAM explicó que una de las pruebas contundentes de que los grupos criminales de ese paísno tienen vínculos con las organizaciones mexicanas, al menos en estos hechos violentos, “es que los once implicados en el homicidio del candidato presidencial en Ecuador eran colombianos y a los 11 los asesinaron dentro de la cárcel de Guayaquil”.
“Al principio decían que eran mexicanos, las investigaciones fueron muy contundentes, ninguno de los once implicados directamente en el homicidio del candidato presidencial era mexicano. Se demostró que no había ningún lazo de complicidad”, acotó.
Apuntó que las agresiones y actividades criminales ocurridas este martes en Ecuador no pueden considerarse hechos por grupos terroristas, como se había calificado por algunos medios de comunicación.
“Siempre es un error propagandístico decirle terrorista a un narcotraficante, es hacerle un favor, si bien es cierto que en las democracias no estamos de acuerdo con las tácticas terroristas para lograr objetivos, casi siempre, según mis estudios, el terrorismo está motivado por demandas separatistas o independentistas; por demandas de carácter étnico de carácter religioso o político ideológico. (…) Son grupos organizados que utilizan técnicas y tecnología para aterrorizar a las personas”, dijo el especialista.
‘Fito’ tiene una amplia trayectoria criminal en Ecuador, pero su nombre tomó mayor relevancia durante el verano del 2023 en el marco de las elecciones presidenciales, luego de que Fernando Villavicencio, candidato a esos comicios, denunciara públicamente la amenazas de muerte que había recibido de es líder criminal de Los Choneros, a quien identificó como un narcotraficante del Cártel de Sinaloa.
“En un parte policial en el que se revela una gravísima amenaza de uno de los capos del Cártel de Sinaloa, me refiero a alias ‘Fito’, en mi contra y en contra de mi equipo de campaña con una advertencia que si sigo refiriéndome a él y a su estructura, ellos atacaran en mi contra o atentaran contra mi vida”, dijo con rueda de prensa el candidato a la presidencia del país sudamericano a finales de julio del 2023; días después fue asesinado durante un mitin.
Previo al asesinado de Fernando Villavicencio, Fito había anunciado una tregua de paz con otras células criminales de ese país, incluidos Los Lobos y Los Tiguerones, quienes son asociados con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG). Sin embargo, esto no ocurrió.
