La elefante Tikiri, cuyas imágenes dieron la vuelta al mundo al trascender que era obligada en Sri Lanka a desfilar sin descanso pese a sus lamentables condiciones de salud, murió y la ONG Save Elephant Foundation (SEF) mostró “alivio y dolor” por la noticia.
El elefante domesticado, de unos 70 años, falleció la noche del martes en Kegalle, a unos 80 kilómetros al este de Colombo, capital de Sri Lanka, y el gobierno local ordenó la realización de una autopsia, anunciaron este miércoles funcionarios del departamento de vida silvestre.
Expertos locales en paquidermos aseguraron que se trata de un animal maltratado y gravemente desnutrido.